Fondos en Brasil

Los fondos Criatec nacieron como una iniciativa brasileña para atender a las micro y pequeñas empresas con capacidad de crecimiento basado en el desarrollo tecnológico. Su principal objetivo es capitalizarlas, brindando apoyo gerencial y desarrollando gestores locales especializados a fin de promover empresas de alta tecnología en las localidades de menor actividad económica.

El Criatec I fue constituido en Brasil como un capital semilla, con 10 años de duración, prorrogable por hasta 5 años. Dentro del período de 10 años, los 4 primeros fueron dedicados a la prospección de inversiones, los demás años fueron dedicados al acompañamiento y aceleración de las empresas invertidas para la futura desinversión.

El fondo contó con gestores regionales para prospección y acompañamiento de las inversiones. Contempló un patrimonio comprometido de US$ 51,298,858, con aporte de US$ 41,039,086 de BNDESPAR y US$ 10,259,771 del Banco do Nordeste (BNB) para capitalizar 36 empresas innovadoras, con facturación líquida inferior a US$ 3,077,931 en el año inmediatamente anterior a la capitalización por parte del fondo).

Las condiciones principales fueron que: 1) las empresas actúen en los sectores de tecnología de la información, biotecnología, nuevos materiales, nanotecnología, agronegocios y otros; 2) un mínimo de 25% del patrimonio del fondo sea invertido en empresas con facturación de hasta US$ 769,482; 3) un máximo de 25% del patrimonio del fondo sea invertido en empresas con facturación entre US$ 2,308,448 a US$ 3,077,931; y 4) el valor de la inversión por empresa sea limitada a US$ 2,564,942.

Con el éxito del Criatec I, surgieron otros agentes interesados en invertir en el Criatec II. En este fondo el BNDES subscribió US$ 46,829,098, y los otros inversionistas US$ 23,584,905.7. De esa forma, el BNDES redujo al 66,5% su cuota respecto al Criatec I, lo que está en línea con el objetivo del banco de apalancar inversiones y fortalecer el ecosistema de innovación con nuevos inversionistas.

Los demás inversionistas son: Banco do Nordeste (US$ 11,357,097), Banco de desenvolvimento de Minas Gerais (US$ 3,785,699), Banco de Brasília (US$ 3,785,699), BADESUL Desenvolvimento (US$ 3,785,699) y el gestor seleccionado en septiembre de 2013, Bozano Investimentos (US$ 870,710). Entonces el total del patrimonio comprometido del fondo es de US$ 70 millones.

El Criatec II cuenta con la asesoría operacional de Triaxis Capital. Este fondo busca invertir en 36 empresas innovadoras, con facturación líquida inferior a US$ 3,785,699 (en el año inmediatamente anterior a la capitalización por parte del Fondo).

Las condiciones principales son que: 1) las empresas deben ser prioritariamente de los sectores de tecnología de la información y comunicación (TIC), biotecnología, nuevos materiales, nanotecnología, agronegocios; 2) cada empresa podrá recibir como máximo US$ 2,271,419, US$ 946,424 en la primera inversión y hasta US$ 1,324,994 en subsecuentes inversiones; y 3) mínimo 25% del patrimonio del fondo sea invertido en empresas con facturación de hasta US$ 946,424.

En el transcurso de 2015, el BNDES anunciará, al gestor de un tercer fondo, con lo cual los fondos Criatec II y Criatec III deberán contar con cerca de US$ 128 millones, que serán invertidos en por los menos 72 empresas innovadoras en las regiones Sul, Sudeste, Centro-Oeste, Norte e Nordeste de Brasil. Así los tres fondos contarían con un patrimonio de unos US$ 160 millones.

Resultados

El Criatec I invirtió por medio de acciones o debentures convertibles entre 2008 y 2014, en 36 empresas, casi el 2% de 1.847 registradas, ubicadas en siete polos regionales de actuación, Los recursos fueron utilizados para acelerar o crecimiento de las compañías invertidas, prioritariamente a través de inversiones en expansión productiva y distribución comercial; totalizando US$ 33,857,246 en aportes. El Criatec II aprobó inversiones en 8 empresas, en tres de ellas ya invirtió – US$ 1,703,564- a partir del 2014, y cinco 5 están en proceso de due diligence.

Las empresas invertidas por el Criatec I presentaron alto crecimiento de sus ingresos brutos, siendo en promedio mayor al 30% anual. Además, cinco de las empresas invertidas figuran entre las 100 empresas brasileñas que más crecen.

El Criatec I concluyó ocho desinversiones en febrero de 2015, quedándose con 28 empresas en su portafolio. Desde el punto de vista de los ingresos operacionales brutos se observa un crecimiento de US$ 7,650,898 en 2008 a US$ 47,321,239.3 en 2014, en total en las 28 empresas. Un excelente ejemplo de empresa de alto crecimiento.

Las empresas invertidas además fueron capaces de captar US$ 43,532,676 adicionales, valor superior a los US$ 38,199,923.8 invertidos por el Criatec I. Eso muestra que las startups invertidas consiguieron demostrar su atractivo al sistema financiero y al mercado de capitales, inclusive privado. Estos US$ 43,532,676 se dividen en: financiamiento de largo plazo US$ 10,883,169, subvenciones US$ 17,413,070 y coinversión US$ 15,236,436.

Una segunda dimensión de fundamental importancia es la dimensión de la innovación. Sobre este aspecto, las empresas invertidas por el Criatec I ya solicitaron 24 patentes en el Brasil y 4 en el exterior. De éstas, 10 patentes fueron registradas en Brasil y una en el exterior. En el aspecto de registros de patentes, es posible observar la capacidad que Criatec I mostró al zeleccionar empresas innovadoras.

En cuanto al aspecto de productos lanzados, se observa que el Criatec I apoyó a las pequeñas empresas a llevar sus innovaciones al mercado. Tanto es así, que las empresas invertidas tienen 807 productos, de los cuales 108 fueron lanzados en 2014. Esto demuestra que las empresas invertidas se mantienen innovando, aún después de la inversión del Criatec I. Algunas de las empresas invertidas por el Criatec I también recibieron premiaciones internacionales. Por ejemplo, las empresas Enalta y Bug Agentes Biológicos (Bug). A Enalta, que desarrolla equipos y programas para gestión y automatización de procesos agrícolas, fue elegida como una de las 50 empresas más innovadoras del mundo en 2013, según la revista norteamericana Fast Company. Por su parte, Bug, que comercializa y produce agentes de control biológico de plagas, fue elegida en 2014, una de las 36 empresas de tecnología pionera en el mundo, según el Fórum Económico Mundial.

Otro dato importante es respecto a la calidad de los empleos generados. Actualmente, las empresas invertidas suman 788 empleos directos. De ellos aproximadamente el 43% está ocupado por empleados con nivel de educación superior y, casi 10% poseen maestría o doctorado. Estos números muestran la importancia de la inversión en pequeñas empresas de base tecnológica en la generación de empleos de alta calificación.

Por otra parte, se destaca que aproximadamente el 65% das empresas invertidas por el Criatec I tienen relación con incubadoras de empresas y parques tecnológicos, lo que refuerza el objetivo de los fondos de la serie Criatec de integrar el ecosistema nacional de innovación.

Conclusiones

Los resultados del Fondo Criatec I, la calidad y ritmo de las inversiones del Fondo Criatec II y el número creciente de inversionistas que se presenta para el Fondo Criatec III muestran que los fondos de la serie Criatec son un éxito. Ese éxito es proveniente de años de aprendizaje del BNDES, que lo llevaron a crear fondos de alcance nacional. Muestran además, que existe un creciente mercado de startups de base tecnológica en Brasil y que el BNDES, como institución de desarrollo, debe inducir inversiones en el segmento, atrayendo cada vez más inversionistas y gestores privados.

Los fondos de la serie Criatec, que cuentan tanto con gestores privados de ámbito nacional, como con representantes regionales, ligados a los ecosistemas locales de innovación y Cercanos a las empresas invertidas, muestran una innovación acertada, que permitió al BNDES analizar y seleccionar algunos de los mejores emprendedores y tecnologías disponibles en el Brasil, para los cuales se asignó no solo recursos, sino también compañamiento cercano que puede constantemente apoyar en cuestiones de gestión y gobernanza.

Un ecosistema de innovación creciente y vibrante depende de emprendedores instruidos y Motivados, investigación de punta, sistema financiero desarrollado, inversionistas calificados y prestadores de servicios competentes. Los fondos de la serie Criatec vienen desarrollando varios de esos actores en cuanto motiva a otros a entrar en ese ambiente. Los resultados positivos ciertamente traerán más emprendedores, motivarán investigadores, inversionistas y prestadores de servicios, creando un círculo de crecimiento de competencias y empresas de base tecnológica.

En el desarrollo de los fondos ha sido importante el aumento y la diversificación de la base de inversionistas en capital semilla, con la activa participación de las agencias y bancos regionales de desarrollo para el fortalecimiento del ecosistema brasileño de innovación, pues disemina el modo de operación de los fondos de capital de riesgo enfocado en las empresas de base tecnológica, así como como aproxima a las agencias y bancos regionales a los clientes con alto potencial de crecimiento e impacto, en sus regiones de actuación. En el mediano plazo se proyectan también en captadores de oportunidades y contribuyen a la diseminación de las buenas prácticas financieras de las empresas nacientes.

Por otra parte, se destaca el hecho que el Criatec III puede ser el primer fondo de capital semilla brasileño, de ámbito nacional, y contar con un inversionista privado. Atraer grandes empresas privadas nacionales para invertir en capital de riesgo también es una forma de fortalecer el ecosistema de innovación, y simultáneamente, diseminar el espíritu innovador entre ellas y sus cadenas locales de proveedores de base tecnológica.